Resumen:
El Femicidio es un delito en aumento en Ecuador, lo que subraya la necesidad de analizar la eficacia de las medidas de protección en los tribunales contra agresores de mujeres. Actualmente, estas medidas no han logrado proteger adecuadamente a las mujeres. Se estima que 6 de cada 10 mujeres en Ecuador han sufrido algún tipo de violencia de género, según el Instituto Nacional de Investigaciones, Estadísticas y Censos. Para abordar esta problemática, se utilizó una metodología de enfoque mixto con alcance descriptivo-explicativo y un diseño no experimental transversal, permitiendo un estudio preciso del fenómeno social, sus causas y condiciones. Como resultado, se propuso la creación de una oficina técnica en cada unidad judicial del país, operando ininterrumpidamente los 365 días del año, para combatir la violencia contra la mujer y prevenir el Femicidio. En conclusión, no basta con tener una normativa que proteja los derechos y libertades de las víctimas de violencia de género. Es crucial aplicar el principio de garantismo penal y que el Estado incremente los equipos especializados para analizar y garantizar los derechos y la protección de las víctimas, asegurando así una tutela efectiva de sus derechos como mujeres.