Resumen:
A medida que va transcurriendo el tiempo, ha ido manifestándose el menester de acoger a la educación, no solo considerándola como un mecanismo para adquirir conocimientos, sino que, además traerlo a colación cuando se hable de una correcta formación de los niños.
Es así que para coadyuvar a una adecuada formación de los niños se debe tener en consideración a la inteligencia emocional, ya que si se despliega de una adecuada manera contribuirá con el desempeño académico.
Además, se debe tener en consideración que el aspecto de inteligencia emocional no solo debe ser promovido en las aulas, sino que, además se lo debe impulsar desde los hogares y en el entorno social.